La corteza terrestre está dividida en fragmentos, balsas de roca sólida que flotan sobre un océano de magma de una forma similar a como las placas de hielo lo hacen sobre el agua. Las placas chocan entre sí, se superponen, se rozan y deforman unas a otras dando origen a nuevas cordilleras montañosas, pero también a violentos terremotos, que se concentran y son de mayor intensidad precisamente en las zonas de fricción.
Ahora, el hallazgo de esta capa de «lubricante» de roca fundida, que suaviza y facilita la interacción de las placas tectónicas y hace posible que se deslicen sobre el manto, puede ayudar a comprender muchos de los principios básicos de la geología de nuestro planeta, entre ellos el vulcanismo y los terremotos.
Durante décadas se ha pensado que el agua disuelta en los minerales genera un manto más dúctil que facilita los movimientos tectónicos de placas. Pero existían pocas imágenes claras y datos para confirmar o desmentir esta teoría. "Nuestros datos nos dicen que el agua no puede adaptarse a las características que estamos viendo", dijo Samer Naif, estudiante graduado de Scripps y autor principal del artículo. "La información de las nuevas imágenes confirman la idea de que es necesario que haya una cierta cantidad de material fundido en el manto superior y eso es realmente lo que está creando este comportamiento dúctil para que las placas se deslicen", agrega.
Usando tecnología avanzada de imágenes del fondo marino electromagnético de la Institución Scripps de Oceanografía, los científicos fotografiaron 25 kilómetros de la gruesa capa de roca parcialmente fundida del manto por debajo del borde de la placa tectónica de Cocos, que se mueve bajo el océano Pacífico de la costa oeste de América Central. Esta tecnología se utiliza desde el año 2000 para la detección de reservas de petróleo y gas. Pero sus implicaciones en la geología podrían salvar vidas."Con estas imágenes podremos mejorar nuestro conocimiento del rol que tienen los fluidos, tanto marinos como de roca derretida bajo la superficie, en procesos de movimiento tectónico y volcanes", afirma Bil Haq, director de la división de Ciencias del Océano de la Fundación Nacional de Ciencia.
Ahora, el hallazgo de esta capa de «lubricante» de roca fundida, que suaviza y facilita la interacción de las placas tectónicas y hace posible que se deslicen sobre el manto, puede ayudar a comprender muchos de los principios básicos de la geología de nuestro planeta, entre ellos el vulcanismo y los terremotos.
Durante décadas se ha pensado que el agua disuelta en los minerales genera un manto más dúctil que facilita los movimientos tectónicos de placas. Pero existían pocas imágenes claras y datos para confirmar o desmentir esta teoría. "Nuestros datos nos dicen que el agua no puede adaptarse a las características que estamos viendo", dijo Samer Naif, estudiante graduado de Scripps y autor principal del artículo. "La información de las nuevas imágenes confirman la idea de que es necesario que haya una cierta cantidad de material fundido en el manto superior y eso es realmente lo que está creando este comportamiento dúctil para que las placas se deslicen", agrega.
Usando tecnología avanzada de imágenes del fondo marino electromagnético de la Institución Scripps de Oceanografía, los científicos fotografiaron 25 kilómetros de la gruesa capa de roca parcialmente fundida del manto por debajo del borde de la placa tectónica de Cocos, que se mueve bajo el océano Pacífico de la costa oeste de América Central. Esta tecnología se utiliza desde el año 2000 para la detección de reservas de petróleo y gas. Pero sus implicaciones en la geología podrían salvar vidas."Con estas imágenes podremos mejorar nuestro conocimiento del rol que tienen los fluidos, tanto marinos como de roca derretida bajo la superficie, en procesos de movimiento tectónico y volcanes", afirma Bil Haq, director de la división de Ciencias del Océano de la Fundación Nacional de Ciencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario