viernes, 26 de junio de 2015
COREL DREAW - HERRAMIENTA MEZCLA 2
PREPARACIÓN DE ARTES Y ORIGINALES - Parte 2
La fuente (o el tipo).
Se relaciona en especial con las fuentes de letras
existentes en forma comercial (es decir, excluyendo las infinitas posibilidades
de la caligrafía). Las fuentes comerciales ofrecen por lo regular toda una
serie de variaciones, conformando lo que se denomina una familia.
Las variaciones más frecuentes son: de ojo claro (light),
de ojo medio (regular), negrilla (medium), supernegrilla (bold), bastardilla (o
itálica), y de contorno (outline). Con los actuales recursos electrónicos
dichas variaciones son fácilmente aplicables, incluso combinadas, y las
posibilidades se amplían con múltiples grados de expandido y de condensado.
Para textos a imprimir invertidos o en color sobre fondos oscuros y en cuerpos
bajos, se recomienda componer los caracteres en negrilla.
Las nuevas tecnologías aplicadas a la composición ofrecen
aún más variables para la presentación de los textos, incluso partiendo de una
misma fuente y un mismo cuerpo. Estas posibilidades son entre otras:
inclinación en diferentes angulaciones, inscripción sobre curvas o perfiles,
invertido, seminvertido y degradado.
Bases para la composición de texto
Sea cual sea el procedimiento optado para el
levantamiento de los textos, una serie de datos mínimos deben ser comunicados
al operario para que el original resultante se ajuste al trabajo específico.
El espacio entre renglones se denomina interlineado. Para
ordenar el levantamiento de renglones múltiples de texto, es necesario indicar
el tamaño (cuerpo) de las letras más el interlineado.
El sistema de medidas más preciso y cuyo conocimiento y
aplicación se recomienda para la composición de textos, es un sistema
duodecimal basado en las unidades punto y pica.
El punto equivale a 1/72 de pulgada, aproximadamente 0.35
milímetros. La pica, a su vez, equivale a 1/6 de pulgada, es decir 12 puntos o
aproximadamente 4.2 milímetros.
El tamaño de los caracteres se expresa en puntos, al
igual que el interlineado. Por su parte, la longitud de la línea o renglón se
específica en picas, como también la altura ocupada por el texto. Una regla
graduada en picas, llamada tipómetro, es la herramienta adecuada para la
medición y el cálculo en diseño y composición de texto.
Para solicitar la composición de los textos para un
proyecto gráfico determinado, resulta indispensable el ordenamiento de los
mismos especificando con claridad para cada uno: fuente, estilo y tamaño de
letra, interlineado, y longitud y conformación de las columnas —justificado',
alineado a la derecha, alineado a la izquierda, centrado, periférico o de contorno
(inscribiendo un marco o figura)—. Similar importancia tiene la entrega de un
bosquejo —del tamaño real—, en el cual se especifiquen las áreas que ocupará el
texto.
Cálculo de la relación espacio-texto
Es obvio que al componer un texto extenso en diferentes
cuerpos, tomando como base una misma fuente de letra, las áreas ocupadas serán
sustancialmente distintas. Pero también se descubrirán variaciones más o menos
notorias al hacer la prueba con fuentes diferentes en un mismo cuerpo.
Si bien las herramientas modernas de diagramación y
armada electrónica permiten efectuar en tiempos relativamente cortos sucesivos
cambios en la composición de textos, tales como aumentar o reducir el cuerpo de
las letras del texto para un libro completo, dicho proceso de ajustes implica
cuando menos la disposición de equipos, operarios e instalaciones, más
determinados gastos de energía y de materiales de prueba. En resumen, cada
ensayo y cada corrección incrementan proporcionalmente los costos del trabajo.
Por esta razón, una operación básica para cualquier
diseñador es el cálculo del espacio que ocuparán los textos en el impreso,
según una determinada combinación de cuerpo y fuente de los caracteres,
especialmente tratándose de libros o publicaciones donde los desfases pueden
representar un significativo número de páginas. Con frecuencia los desaciertos
en el cálculo conducen a tomar decisiones drásticas en el montaje, como
modificar sustancialmente un diseño, o incluso obligan a rehacer del todo (y
costear de nuevo) un trabajo.
A continuación se presentan procedimientos y fórmulas de fácil aplicación para realizar el cálculo.
Cómputo del texto original
Dos situaciones son típicas en el momento de requerir el
cálculo tipográfico. En el primer caso se deseará saber la incidencia del
grueso de texto, en cantidad de páginas o en espacio, sobre la base de
determinadas pautas de diseño: en esencia, la caja gráfica y un cuerpo y una
fuente de caracteres ya definidos. En el segundo caso, se deseará identificar
el cuerpo y la fuente de caracteres que hagan posible la ubicación del texto en
un espacio o número de páginas restringido.
En ambos casos es preciso empezar por la cuantificación
de los originales, en caracteres. Para facilitar esta operación, es aconsejable
estandarizar la presentación de originales. A propósito, las cuartillas
técnicas generalmente constan de una hoja escrita a máquina de 70 caracteres
por renglón a lo ancho por 25 renglones de profundidad, a doble espacio.
Procedimiento
1. A partir del original se determina el número de
caracteres que contiene una cuartilla.
2. Se determina el número de cuartillas que constituyen
el texto
3. Se multiplica el número de caracteres por cuartilla
por el número de cuartillas, obteniendo así el total de caracteres.
Cálculo sobre pautas de diseño
Las principales características del impreso son:
• Formato (tamaño).
• Márgenes de cabeza, pie, lomo y corte.
• Caja gráfica: columnas, medianiles y demás blancos
tipográficos.
• Fuentes y cuerpos de letra de acuerdo a su jerarquía
(títulos, subtítulos, leyendas, texto básico, referencias y demás).
• Interlineado o espacio entre renglones.
Procedimiento
A partir de la caja gráfica:
1. Se
determina el número de caracteres que caben en cada renglón, según la fuente y
el tamaño determinados.
2. Se determina el número de renglones que caben en cada
página de acuerdo al interlineado.
3. Se multiplica el número de caracteres de cada renglón
por el número de renglones, obteniendo así el número de caracteres por página
armada o fotocompuesta.
4. Se divide el total de caracteres del original sobre el
número de caracteres que caben en una página armada, este resultado nos da el
número total de páginas que ocupará el texto en el impreso.
Para libros, a este resultado se le deben sumar las
páginas complementarias, tales como insertos, preliminares y pie de imprenta.
Cálculo sobre limitaciones de espacio
Generalmente toda casa productora o distribuidora de
fuentes incluye en sus catálogos tablas en las cuales se indica el número de
caracteres que caben en una pica para cada estilo y cuerpo, o bien, en el mejor
de los casos, informan el número factor de cada estilo de caracteres. Esta
información puede ser consultada directamente en los catálogos o solicitada al
taller de composición de confianza, con lo cual se facilita todo cálculo.
El número factor distintivo para cada estilo y fuente de
caracteres es una constante que relaciona la variable cuerpo con la variable
número de caracteres por pica, las cuales son inversamente proporcionales: con
un mayor cuerpo caben menos caracteres en una pica.
En resumen, el número factor de una fuente permite
calcular con exactitud el cuerpo de la misma que se debe emplear para que un
texto ocupe un espacio restringido, a partir de las fórmulas que se presentan
en recuadro.
Cuando no sea posible averiguar directamente el número
factor de una fuente cualquiera, se puede recurrir a la correspondiente tabla
de caracteres por pica para calcularlo.
Procedimiento
• Se toman cuatro combinaciones distintas de cuerpo y
número de caracteres por pica, hallando los respectivos productos.
• Se suman los cuatro productos.
• La suma de productos se divide por cuatro, obteniendo
como resultado el número factor de la fuente.
• Se solicita la composición por separado del alfabeto en
minúsculas y sin espacios (abcdefghijklmnñopqrstuvwxyz), en la misma fuente y
en cuatro cuerpos distintos.
• La medida en picas del ancho ocupado por cada alfabeto
se divide por 27 (cantidad de caracteres), para obtener el respectivo número de
caracteres por pica para cada cuerpo empleado.
• Los resultados obtenidos constituyen una tabla parcial
de caracteres por pica, suficiente para actuar de acuerdo con el procedimiento
antes mencionado con el fin de hallar finalmente el número factor de la
fuente.
Observaciones generales
• Cuando el original no es uniforme el cálculo se hace
más dispendio-so, pues obliga a calcular por partes que reunan las mismas
características, hallando resultados parciales a partir de los cuales obtener
el total de caracteres del original.
• Cuando concurren diversos tamaños e interlineados, el
cálculo de cada variación debe hacerse por separado.
• Cuando hay múltiples columnas de texto e ilustraciones,
el cálculo de cada área se realiza por separado y se aplica directamente en la
diagramación, con el fin de evitar que las ilustraciones queden retiradas del
texto en el cual son mencionadas, perturbando la lectura.
• Cuando el original ha sido digitado en un procesador de
texto y es suministrado en disco de computación, al número de bytes que ocupa
cada archivo se le descuenta el 5% (por concepto de comandos) y el resultado
representa el número total de caracteres.
Recursos para composición de texto
Son varios los medios existentes para la composición de
textos con destino a la reproducción gráfica.
• Composición con tipos sueltos
• Composición por fundición
• Tipos para transferencia
• Dactilocomposición
• Impresión láser
• Fotocomposición
Composición con tipos sueltos
Este procedimiento de composición, cuya historia se
remonta a los orígenes de la tipografía, consiste en reunir y ordenar
manualmente tipos sueltos (caracteres de metal grabados en relieve) con
elementos de espaciamiento, formando palabras, líneas y páginas para imprimir
por el sistema tipográfico.
jueves, 18 de junio de 2015
ADMINISTRADOR DE SIMBOLOS
Cada vez que nosotros entramos a CorelDraw a diseñar nos encontramos que todo lo que estamos necesitando no lo tenemos a la mano, para eso en este vídeo les explico paso a paso como utilizar el administrador de símbolos.
PREPARACIÓN DE ARTES Y ORIGINALES
El punto de partida de
cualquier impreso es el diseño general del producto, lo que implica la atención
de una serie de variables: funcionales, artísticas, económicas y técnicas. Este
capítulo se centrará en consideraciones de carácter técnico, cuyo análisis con
frecuencia es descuidado por diseña-dores y creativos, a consecuencia de lo
cual en ocasiones se complica la reproducción gráfica.
El diseño se manifiesta en la
práctica a través de un boceto comprensivo claramente definido que, en la
producción de cualquier impreso, orienta el proceso de preparación, selección y
distribución de los textos e imágenes que conformarán la pieza gráfica.
Estas múltiples labores, que
se resumen en la idea de la preparación de originales y artes para
reproducción, constituyen un proceso
delicado y decisivo. En términos prácticos, la gran mayoría de los
defectos y cualidades de la reproducción gráfica tienen origen directo en la
calidad misma del arte y los originales. Al respecto, un dogma gráfico de
permanente vigencia dice: "sólo de un buen original es posible obtener un
buen impreso".
Clases de originales
Cada proyecto gráfico puede
contener diversas clases de imágenes (textos, títulos, dibujos, pinturas,
fotografías, ilustraciones, tablas, diagramas y demás). En general, para
efectos de la reproducción gráfica, todas las posibles imágenes originales se
clasifican en dos grupos:
• originales de línea.
• originales de tono continuo.
Originales de línea
Cuando se realiza el proceso
de armada manual, pueden ser fijados todos en el mismo arte, para obtener mediante
exposición directa en la cámara fotomecánica las películas FIJB1.C115 integrales
necesarias para la producción de portaimágenes o planchas de impresión. En la
práctica de edición electrónica, los originales de línea pueden ser
digitalizados sin problemas con cualquier escáner de sobremesa en caso de no
haber sido producidos directamente por computador y no son altos los
requerimientos de memoria tanto para su reto-que o modificación como para la
integración a la composición de página. Además, no contraen dificultades de
procesamiento para ningún dispositivo de salida.
Originales de tono continuo
En la fotorreproducción, los
originales de tono continuo reciben un tratamiento peculiar. Este tratamiento,
en la cámara fotomecánica, consiste en interponer al paso de la luz reflejada
por el original durante la exposición una retícula especial que descompone la
imagen en una infinidad de puntos muy pequeños y aun así, de diámetros
variados, que como tales aparecen en el impreso. Las imágenes obtenidas,
llama-das «de medio tono» o «medios tonos>, tienen la apariencia del tono
continuo a causa del limitado poder de resolución del ojo humano el cual desde
la distancia normal de lectura no distingue los puntos individuales sino que por
ilusión óptica los asimila con el tono continuo original.
La reproducción de imágenes de
tono continuo en películas de medio tono en la actualidad preferentemente se
realiza con los exploradores electrónicos de color o escáneres, en especial por
razones de eficiencia y facilidad de control sobre el resultado. El objetivo
del proceso sigue siendo el mismo, aunque como se verá más adelante el
principio varía: las gradaciones tonales se traducen ya no en configuraciones
de puntos de diferente diámetro sino en configuraciones de elementos de
imagen'.
En la práctica de edición
electrónica, el tratamiento de imágenes de tono continuo contrae varias
exigencias. En primera instancia, figuran los requerimientos de un soporte
físico adecuado para su tratamiento interactivo: un experto en preprensa
electrónica calcula que una imagen de tono continuo en blanco y negro, en el
tamaño carta, necesita la misma potencia del ordenador que sería necesaria para
componer todo el texto de la Biblia en su memoria de pantalla de una sola vez'.
Los requerimientos mencionados son sin embargo satisfechos actualmente incluso
por los equipos de autoedición de escritorio (DTP -Desktop Publishing) de
generaciones recientes.
Las imágenes de tono continuo
en blanco y negro pueden ser digitalizadas o capturadas con la mayoría de los
escáneres de escritorio, aunque para trabajo comercial de alto nivel son
recomendables los basados en la tecnología de tubos fotomultiplicadores, ya que
superan, entre otras, las limitantes en los rangos de ampliación y de
resolución características de los escáneres de escritorio basados en la
tecnología de semiconductores.
El tratamiento de las imágenes
de tono continuo a color es el que marca la verdadera brecha entre la
autoedición de escritorio y la edición electrónica profesional. Exigen mayor
amplitud de memoria volatil (RAM) y basta capacidad de memoria permanente (ROM)
para su manipulación interactiva, por ello, la fórmula regular consiste en
explorar las imágenes en un escáner de nivel profesional, realizar el trabajo
de corrección, modificación y retoque en estaciones de edición electrónica del
mismo nivel y comprimirlas como imágenes de baja resolución. En ese estado
pueden ser empleadas incluso en el equipo de autoedición para su
dimensionamiento y ubicación en la composición gráfica. Luego, se envía
nuevamente el archivo integrado al sistema profesional, donde se introduce
automáticamente la imagen de alta resolución en la composición de página y se
prepara la transferencia del trabajo al escáner o la fotocomponedora que
procesará las películas finalizadas para policromía.
Opacos y transparencias
Una segunda clasificación de
los originales, los divide en opacos (u originales de reflexión) y
transparencias (u originales de transmisión). Opacos El original opaco se
reproduce fotográfica o electrónicamente por la acción de una fuente de luz que
se refleja en su superficie. Las pinturas o ilustraciones ejecutadas sobre
soportes no translúcidos y las fotografías en papel son ejemplos de originales
reflectivos u opacos.
Transparencias
Originales de transmisión son
aquellos que se observan por proyección en pantalla o al trasluz y se
reproducen fotográfica o electrónicamente mediante una fuente de luz que pasa a
través de ellos. En consecuencia, forman parte de esta categoría las
transparencias o diapositivas y las ilustraciones elaboradas con tintas transparentes
sobre acetatos.
El diseño
La idea inicial de cualquier
pieza gráfica se manifiesta en un diseño o boceto comprensivo que semeja el
trabajo final en cuanto a la ubicación y disposición de todos sus elementos.
A través del boceto
comprensivo, el cliente, anunciante o quien requiera el impreso verifica que se
ha captado su propósito. Dicha verificación, sea por razones formales o
conceptuales puede significar la realización de nuevos y diferentes diseños o
de ajustes al diseño inicial.
El diseño o boceto tiene pues
una importancia invaluable: en el aspecto práctico, determina la extensión y el
estilo de los textos, el carácter y el motivo de las ilustraciones, el encuadre
y el objeto de la toma fotográfica; de manera global, influye y orienta conceptualmente
la creación de todos los originales. El diseño, por lo demás, debe tener un
alto grado de perfección, para que ofrezca claridad sobre el producto final
esperado y tenga poder de convencimiento sobre quienes tomarán la decisión de
llevar adelante el proyecto. Debe tomarse en cuenta que la producción de un
impreso por lo regular implica inversiones considerables y quien toma la
decisión de realizarlas requiere saber exactamente cómo será el producto final.
En este sentido, un buen diseño es aquel que por sí mismo no deja espacio alguno
para dudas o malentendidos.
En consecuencia, se recomienda
que el diseño:
*sea elaborado preferentemente
con el mismo tamaño final de reproducción.
*sea preciso en dimensiones e
indicaciones, puesto que constituye el modelo que guiará la realización del
impreso en casi todas sus etapas;
*sin importar la técnica
empleada, sea realizado a color (salvo que se prepare precisamente un impreso
en blanco y negro) y simule lo mejor posible los efectos visuales que se deseen
producir finalmente en el impreso.
Igualmente, el diseño debe
atender variables de funcionalidad para el desarrollo de los procesos gráficos
posteriores. En consecuencia, en el momento mismo de emprender el diseño de un
proyecto gráfico debe considerarse:
*el sistema de impresión más
viable, para adecuar el diseño a las ventajas y limitaciones del mismo.
*el tamaño de la prensa en la
cual se desarrollará la impresión, para efectos de acondicionar el formato y
aprovechar al máximo los juegos de tintas.
*el uso final del impreso,
para la elección del sustrato y las tintas, e incluso los procedimientos de
posprensa. Es determinante analizar si el producto se exhibirá en exteriores o
en interiores, si deberá soportar continuas manipulaciones, si servirá de
empaque a productos perecederos y demás consideraciones.
Preparación del texto
Variables del tipo
Los tipos de letra responden a
varias características, que a su vez pueden implicar ventajas o desventajas
para efectos de la impresión:
* El tamaño (o cuerpo).
Las letras se miden según su
altura en puntos, unidades equivalentes a 1/72 de pulgada. Para cada fuente el
tamaño se mide entre el límite superior de las letras con astas ascendentes
(prolongación superior de la «b» y la (4» , por ejemplo) y el límite inferior
de las minúsculas con astas descendentes (prolongaciones de la «p» y la ,,q»,
por ejemplo).
Los tamaños de letras más
usuales oscilan entre 6 y 72 puntos (2. 1 y 25.2 mms.), aunque es posible
obtenerlos desde 4 hasta 400 puntos o más. En esencia entre más pequeñas sean
las letras implican una mayor dificultad para ser reproducidas.
* El trazo.
Es la
característica que refiere al aspecto peculiar de cada tipo de caracteres. Vale
decir que las letras de perfil más fino y con serifas implican limitaciones
para su reproducción en colores trama-dos, lo cual significa que se recomienda
su impresión en una sola de las tintas proceso o de lo contrario se plantea la
necesidad de realizar una impresión adicional con una tinta de color especial.
La elección del tipo obedece
por lo general a criterios estéticos. Sin embargo, siempre conviene tener en
cuenta el factor legibilidad, por cuanto algunos tipos, a pesar de su atractivo
visual, producen fatiga o confusión al lector, si son aplicados en la
producción de textos extensos. Por lo regular, los tipos implicados resultan
ventajosos en la confección de titulares, destacados o en textos muy breves.
Por su parte, las letras de configuración más compleja que de manifiesto son o
se asimilan al rango de ilustraciones reservan su uso a los «capitulares»4 o en
aplicaciones netamente gráficas donde la legibilidad no es fundamental.
Etiquetas:
línea,
Opacos,
Originales,
texto,
Transparencias
lunes, 15 de junio de 2015
TIPS PARA IMPRESIÓN
En este tips les traigo un vídeo con información valiosa.
Cuando mandamos a imprimir un archivo de nuestra computadora y notamos que el impreso es totalmente diferente la gama de color que nosotros tenemos del original es porque los colores en la fotografía están dados por RGB ó porque el impresor cambio los colores de las planchas, es decir a la plancha Cian le aplico el color Magenta y al Magenta le aplico el Cian.
PROCESOS EN LA INDUSTRIA GRAFICA
PRIMERA PARTE
Generalidades
La realización de la gran
mayoría de los productos impresos desde
un afiche hasta un libro o una caja plegadiza implica llevar a cabo una cadena
de procesos, de la cual la impresión es apenas uno de los eslabones. No
obstante, en la práctica, la impresión sirve de eje de la producción, tanto así
que con frecuencia se subdividen los procesos gráficos en preimpresión (o
preprensa), impresión y posprensa (o terminación).
Como en especial la categoría
de preimpresión resulta muda o su generalidad es excesiva, se propone la
clasificación siguiente, al menos con fines aclaratorios:
• Preparación de Artes y
Originales
• Obtención de Planchas
• Ejecución de la Impresión
• Terminación del Producto
Gráfico
Se componen así cinco grupos
de procesos para comprender la producción gráfica en general. Es importante
anotar que el desarrollo tecnológico marca una tendencia hacia la
simplificación de los procesos mencionados. Este manual, sin embargo, se
propone ser útil para quienes intervengan o deseen intervenir en la realización
de cualquier proyecto gráfico, sea cual sea el nivel de sus recursos, por esta
razón tomará como eje argumental el desarrollo de los procesos gráficos en el
ordenamiento convencional enumerado, anotando en cada caso pertinente las
peculiaridades de los mismos en su ejecución con medios tecnológicos avanzados.
Secuencia convencional de los procesos gráficos
En los capítulos siguientes se
desglosará a fondo cada uno de los procesos gráficos, aquí se describe a la
ligera su sustancia, tomando el caso de la producción de un plegable
promocional, con el objeto de dilucidar las inquietudes primarias.
Si se desean diez mil
ejemplares de un plegable, es indispensable empezar por el diseño o la
concepción global del impreso. Una vez definido el diseño se procede a la
preparación de originales, lo cual significa elaborar o conseguir las
ilustraciones y fotografías, redactar o editar los textos y los títulos,
definir con exactitud la posición que ocupa cada uno de estos y otros tantos
elementos que se quieran incluir (arabescos, recuadros, líneas, logos,
troquelados, etc.). Por último, se realizan los artes finales —que para el caso
son dos, uno por cada cara impresa del plegable.
Dados en su estado definitivo
los artes y originales, se efectúa la fotorreproducción de los mismos. En
esencia, se trata de plasmar, en una plancha y al tamaño en que serán impresas,
todas las imágenes que componen el plegable.
Antes de continuar con el
plegable, es conveniente aclarar algunos conceptos. La operación de imprimir —en
la gran mayoría de los sistemas de impresión— consiste en transmitir tinta a un
sustrato con la interposición directa o indirecta de un elemento que configura
la imagen deseada y mediante la acción de una máquina impresora o prensa.
Para una explicación
didáctica, se puede tomar el caso de una persona (máquina impresora) que emplea
un sello (portaimagen), previamente presionado en una almohadilla entintada
(tinta), para registrarlo (imprimir) en una serie de hojas (sustrato). De lo
cual se deduce la normal coincidencia de cuatro elementos mínimos para realizar
una impresión:
• sustrato
• tinta
• portaimagen
• prensa
Conviene aclarar que el
sellado común de oficina dista de ser un caso representativo de la impresión
gráfica industrial, donde la uniformidad de la imagen en todos los ejemplares
constituye el objetivo prioritario y el fundamento de la impresión.
Hasta aquí el paréntesis. A
partir de los artes y originales sirven a su vez de base para la obtención de las
planchas es decir, entre otros, las planchas litográficas o flexográficas, los
clisés tipográficos, los cilindros de rotograbado y los esténciles serigráficos
(de screen).
Producidos los portaimágenes
(Planchas), se instalan en la correspondiente máquina impresora y se realiza la
impresión propiamente dicha. No sobra decir que, dependiendo del carácter de la
impresora, previamente puede haber sido necesaria la conversión del sustrato al
formato adecuado para la impresión. Un caso: si se va a imprimir en una máquina
de cuarto de pliego, la cartulina, por ejemplo, se debe acondicionar a la
capacidad de la prensa. Igualmente ha sido preciso preparar con antelación las
mezclas de tinta requeridas.
Realizada la impresión,
todavía faltan varias operaciones para disponer de los diez mil plegables,
operaciones que en general se congregan en el concepto de posprensa.
Si se supone que en un cuarto
de pliego —formato en el cual se efectuó la impresión del ejemplo— caben seis
ejemplares del plegable, hay que separarlos y transformarlos a sus dimensiones
definitivas —operación de refile—. Luego de lo cual se tendrían diez mil hojas
del tamaño previsto impresas por ambos lados; pero como el producto esperado
finalmente es un plegable, deben efectuarse los pliegues, lo cual puede
implicar varias operaciones adicionales.
Aun con esto, faltaría
mencionar las operaciones de empaque, para no hablar de los posibles trámites
de embarque.
Alternativas a la secuencia convencional
La anterior sería una visión
global de los pasos convencionales para la producción de una pieza gráfica.
Como se mencionó anteriormente, el desarrollo tecnológico, especialmente en el
campo de la electrónica, ha inducido en la industria gráfica la tendencia a la
simplificación de los procesos requeridos en su producción. A continuación se
expresa a grandes rasgos dicha tendencia.
El primer salto posible es el
de obviar los artes finales en su versión material —sobre papel, cartulina o
similar—. Aplicado a la industria gráfica, el desarrollo de los ordenadores
abrió inicialmente la posibilidad de la preparación de página en equipos
electrónicos de escritorio sin la inclusión de fotografías u otros originales
de tono continuo. Básicamente se trataba de preparar artes de línea en medio
electrónico, los cuales podían ser producidos en papel fotográfico —para su
procesamiento con medios fotomecánicos convencionales— o directamente en
película, lo más recomendable, transmitiendo la información digital de imagen a
máquinas fotocomponedoras.
Posteriormente, mejoras en la
capacidad de las memorias electrónicas, la introducción de programas de
aplicación gráfica con mayor control para el tratamiento de la imagen y el desarrollo
de periféricos de estructura abierta han hecho posible la inclusión y manejo de
todas las imágenes en la composición de páginas completas por medio
electrónico, permitiendo la producción integral de planchas finalizadas.
El avance en la tecnología ido
habilitando el procesamiento directo de planchas litográficas. Simultáneamente
se han ido introduciendo procesadores específicos de portaimágenes
flexográficos, serigráficos y de otros sistemas, que operan a partir de
información digital de imagen. Así, tienden a ser también innecesarias las
películas, pues un puente conduce hacia los portaimágenes directamente desde
los archivos de imagen preparados en el computador.
En esta línea de
simplificación de procesos, el nivel más alto de desarrollo alcanzado hasta hoy
lo constituyen las impresoras offset digitales. Ellas reciben archivos de
imagen digitalizada y los imprimen a todo color, incluyendo la reproducción de
fotografías y tramas finas. Esto sin necesidad de procesar películas ni
portaimágenes, por cuanto el portaimagen está incorporado a la impresora y se
prepara automáticamente para cada ciclo de impresión según la información
digital de imagen introducida.
En síntesis, son múltiples las
vías optables para realizar un proyecto gráfico. La secuencia convencional de
procesos gráficos propuesta al comienzo de esta introducción tiene una serie de
variantes, hasta el punto que determinados recursos tecnológicos hacen muy
frágil la frontera entre preimpresión, impresión y posprensa.
Camino de la variedad y el experimento
Se esbozó la secuencia
convencional para la producción de un impreso y se insinuaron las posibilidades
de simplificar esa secuencia. Desde luego que como la variedad de los productos
gráficos es casi ilimitada, cada producto específico supone una combinación
específica de operaciones. Es más, como incluso son infinitas las variaciones
del genérico “plegable» o, dicho de otra forma, pueden ser sutiles o notorias
las diferencias entre una revista y otra, entre uno y otro catálogo, entre dos
estandartes, la ejecución técnica de cada impreso no es una rutina absolutamente
preestablecida, en cada cual hay campo para las decisiones
creativo-funcionales.
A propósito, la mayor ventaja
de los productos impresos reside en su capacidad de conservación, con lo cual a
su vez estos se pueden constituir en prueba incontrovertible de las fallas
cometidas en su producción. Esto obliga a extremar la atención en el desarrollo
de cada uno de los procesos mencionados, y más aún, en cada una de las
operaciones que ellos implican: la más mínima omisión inadvertida en un
comienzo y apenas detectada en los procesos posteriores, conlleva difíciles y
costosas operaciones de corrección; así como cualquier des-cuido en las fases
finales desvirtúa todos los aciertos previos.
Por lo demás, no hay por qué
alarmarse, la producción industrial gráfica no está vedada para la
experimentación y el aprendizaje, sólo requiere cuidado y buen juicio además de
un conocimiento sereno de los procesos en conjunto, ya la realización práctica
corresponde a los profesionales en cada proceso.
Etiquetas:
Arte,
impresión,
originales en papel,
planchas,
portaimagen,
prensa,
sustrato,
terminación,
tinta
viernes, 12 de junio de 2015
SEMITONOS Y RELLENOS DEGRADADOS
SEMITONOS:
Descomponer una imagen en puntos redondos (Semitono de Color), similares a las tramas de los diarios, es un efecto útil para multitud de diseños publicitarios, aqui les mostrare paso a paso un tutorial con un video de apoyo, es muy fácil.
DEGRADADOS:
Transcripción de Degradación de color en el diseño gráfico
En diseño gráfico, un degradado (o un gradiente de color) es un rango de colores ordenados linealmente con la intención de dar visualmente una transición suave y progresiva entre dos o más colores. La mayoría de programas informáticos de retoque fotográfico o vectores (Photoshop, Illustrator, Corel Draw, permiten realizar de forma sencilla degradados con los que rellenar formas y contornos.
En el software informático, los degradados se constituyen mediante una progresión de colores que operan en el espacio de color (RGB o CMYK habitualmente) desde el primero hasta el segundo, en los que se va reduciendo progresivamente el porcentaje del primer color y se va aumentando proporcionalmente en la misma medida el porcentaje del segundo color.
Degradación de color en el diseño gráfico
Degradado axial
Un degradado de color axial (también conocido como degradado lineal) viene definido por dos puntos y un color en cada punto. El rango de colores a lo largo de la recta imaginaria que pasa por esos puntos se calcula usando interpolación lineal, extendiéndose por la perpendicular a esa línea.
Modelo de color CMYK
El modelo CMYK se basa en la cualidad de absorber y rechazar luz de los objetos. Si un objeto es rojo esto significa que el mismo absorbe todas las componentes de la luz exceptuando la componente roja.
Modelo de color RGB
El modo RGB asigna un valor de intensidad a cada píxel que oscile entre 0 (negro) y 255 (blanco) para cada uno de los componentes RGB de una imagen en color. Por ejemplo, un color rojo brillante podría tener un valor R de 246, un valor G de 20 y un valor B de 50. El rojo más brillante que se puede conseguir es el R: 255, G: 0, B: 0. Cuando los valores de los tres componentes son idénticos, se obtiene un matiz de gris. Si el valor de todos los componentes es de 255, el resultado será blanco puro y será negro puro si todos los componentes tienen un valor 0. Este espacio de color tiene su representación en el selector de color de Photoshop.
RGB
En este vídeo les explico como hacer Semitonos y Rellenos degradados.
Los Semitonos se trabajan en la siguiente forma:
1. Mapas de Bit - Modo - Escala de Grises.
2. Efectos - Ajustar - Brillo y Contraste.
3. Mapas de Bit - Transformación de Color - Medios Tonos.
4. Mapas de Bit - Convertir a Mapas de Bit - Blanco y Negro (1 Bit)
Etiquetas:
CMYK,
degradados,
modelos de color,
RGB,
Semitonos
Suscribirse a:
Entradas (Atom)